En el 2009 que acaba de terminar se han conmemorado los 50 años de vida de la discográfica usamericana Motown, una empresa dedicada especialmente a la música negra y que ha acogido en su seno a una pléyade de grandes artistas del 'soul' como Diana Ross & The Supremes, Martha & The Vandellas, The Jackson 5 y Michael Jackson, Stevie Wonder, Marvin Gaye, Commodores, Four Tops, Funk Brothers, Rick James, Gladys Knight & The Pips, Marvelettes, Lionel Richie, Smokey Robinson & The Miracles y otros.
Varias han sido las iniciativas en torno a esa redonda efemérides y una de ellas, la denominada 'Motown The Show-The Motown «Motor Town» Revue' llega mañana al auditorio del Kursaal (20.30 horas, 41-45 euros), en una gira que recalará hoy en el Euskalduna de Bilbao y que lo habrá hecho ayer en Zaragoza. El show lo protagonizan tres cantantes más seis intrumentistas. Se subtitula 'Los Grandes Éxitos de la música negra' y propone un 'Tributo especial Michael Jackson'.
La sesión se divide en dos partes (quizás con descanso entre ambas), con unas nueve composiciones en cada una. Además del de Jackson, se cita en el programa los nombres de Jr. Walker, Stevie Wonder, Martha & The Vandellas, Marvin Gaye y The Temptations. Se escucharán clásicos como 'I Heard it trough the Grapevine', 'Dancing in the Street', 'My Girl', 'Mustang Sally', varios 'medley', incluido uno específico de los Jackson 5, o 'Ain't no Mountain High Enough', que se supone cerrará la velada.
Ciudad del motor

La disquera, que iba a marcar una huella especial en la música internacional, nació en Detroit, en el año 1959. Primero bajo la denominación Motor City, en relación a la importancia de la industria automovilística de la villa. Y posteriormente acabó llamándose con el juego de palabras 'Mot' (motor) y 'town' (ciudad) o 'Motown'.
En los años 60 del pasado siglo, los artistas de esa factoría y de otros sellos de música negra coparon no sólo los medios de comunicación y las listas de éxito de los Estados Unidos sino también la escena de Inglaterra y de la mayoría de países occidentales. Incluida la España franquista que resultó ser muy receptiva a tan sabrosas novedades rítmicas y baladísticas, a pesar del gris color del régimen dominante. Su eco ha sido enorme en el pop-rock universal y su legado es ya el de nuestra cultura moderna.

El espectáculo homenajea expecialmente a Michael Jackson y revisa a Wonder, Gaye o The Temptations